29 dic 2014

Corruptos y pringaos

El balance judicial de la corrupción en España -1.700 causas abiertas, 500 imputados y sólo 20 penados – viene a confirmar que el talego es un club muy elitista que tiene reservado el derecho de admisión a los políticos y a sus contratistas, y si algunos logran pasar es únicamente porque se ponen pesadísimos. Para hacernos una idea, es más fácil que un tipo con calcetines blancos entre en una discoteca megapija que un servidor público acabe entre rejas. Con eso, está dicho casi todo.

Por el número de procedimientos abiertos podría deducirse que la corrupción está muy perseguida, pero es evidente que los implicados corren más y durante mucho tiempo. No hay proceso por cohecho, malversación o tráfico de influencias que no dure una década como poco, lo cual es una bendición para los abogados defensores, que suelen ser los únicos que recuperan en su cuentas corrientes una parte de lo robado. Así es como cobra fuerza la idea de que la Justicia funciona divinamente pero sólo con los pringaos de calcetines blancos.