El milagroso remedio del Ejército alemán había sido fabricado por
primera vez en forma líquida por un japonés. Químicos de la fábrica
berlinesa Temmler lo desarrollaron, y en 1937 registraron la patente. Un
año más tarde se comercializó como medicamento. El remedio ahuyentaba
el cansancio, el hambre, la sed y el miedo. Hoy día, Pervitin se vende
ilegalmente bajo otro nombre: crystal meth.