Primavera de 2011. Las elecciones municipales españolas están a la vuelta de la esquina y las redes sociales son un hervidero de noticias, convocatorias y trending topics políticos. El 15M acapara la opinión pública y los partidos políticos en el poder no saben dar respuesta mediática a la información sobre corrupción y recortes sociales que domina la calle.
Alejandro de Pedro Llorca, emprendedor e imputado por 7 delitos en el sumario de la Púnica, tenía la solución perfecta. Fabricar noticias falsas en medios pequeños para moverlas en las mismas redes calientes y así intentar desprestigiar con el ruido a los profesores de La Marea Verde, una de las plataformas sociales que aglutinaba las protestas. El gobierno de Esperanza Aguirre compró su idea y las 45.000 cuentas de Twitter que habían fabricado las empresas de Alejandro de Pedro se pusieron en marcha para mover las noticias. Todo está documentado con pruebas y emails en el sumario de la Púnica.
- Astroturfing: Campañas de opiniones prefabricadas para cambiar tendencias en la opinión pública con mensajes que van directos a la emoción.
- Según la Universidad de Harvard, China tiene contratados a 2 millones de personas para fabricar contenido falso en las redes.
El problema de la masificación de las técnicas de astroturfing es que suponen una verdadera amenaza contra la democracia orgánica de Internet y cuando es el dinero el responsable de todas estas campañas la manipulación es más ponzoñosa. La estrategia es silenciosa y solo somos conscientes de una parte del problema por las denuncias que al final salen a la luz. Por eso reducir el debate de la opinión social a lo que pasa en las redes es engañoso sabiendo que no es natural y está prostituido. Sin quererlo ni desearlo continuamente te puedes ver envuelto en discusiones o hilos provocados por trending topics pagados por una marca o partido político que se frota las manos siendo el sujeto impostado del relato público.