Jón Gnarr desplaza a las siglas tradicionales con una formación que se declara abiertamente corrupta y asegura que no cumplirá sus promesas electorales.
El Partido Mejor, al que hace una semana las encuestas colocaban con mayoría absoluta en la capital, nació como una parodia frente a las formaciones tradicionales, acusándolas de la crisis económica que en octubre de 2008 colocó a Islandia al borde del colapso al desmoronarse su sistema bancario, que tuvo que ser nacionalizado.
De ahí que afirmó desde el principio que no cumpliría ninguna de sus promesas electorales y que a diferencia de los otros partidos, que eran corruptos en secreto, sería abiertamente corrupto, esgrimiendo lemas como "diles a los okupas [por los políticos] que es hora de irse", al ritmo de Simply The Best, de Tina Turner.
Durante la campaña, Gnarr defendió traer un oso polar al zoo de Reikiavik y un Parlamento libre de drogas en 2020.