Senadores de EEUU y diplomáticos europeos fueron objeto de presiones psicológicas por el Ejército estadounidense en 2010 con el propósito de conseguir más recursos para la guerra en Afganistán, según la revista Rolling Stone.
Los soldados recibieron órdenes de crear perfiles de cada visitante, incluyendo el historial de votaciones de los senadores, así como sus gustos y asuntos que consideraban de alta prioridad, subraya Rolling Stone.
"Manipular personas"
Añadió que el teniente coronel Michael Holmes, encargado de la unidad de "operaciones de información", explicó que "mi función en operaciones psicológicas es manipular a las personas, hacer que el enemigo se comporte de la forma que queremos que comporte".
"Tengo prohibido hacer eso con mi propia gente. Cuando me piden que utilice estas destrezas con senadores y congresistas, se están pasando de la raya", agregó.