La decisión fue tomada tras la condena del sacerdote español Lucio Vallejo Balda por revelación de secretos en el conocido caso Vatileaks 2 sobre las finanzas de la Santa Sede. El “traidor” es de la misma secta ultra católica del aún ministro del Interior.
El 7 de julio Lucio Vallejo Balda fue condenado a casi dos años de prisión por revelar secretos de las finanzas Vaticanas a dos periodistas, Gianluigi Nuzzi y Emiliano Fitipaldi, que escribieron sendos libros: Camino de la Cruz y Avarizia.
El Papa fue avisado de que el Opus Dei, de la mano de Balda, “estaba preparándole una encerrona que echara abajo el estilo de progreso y transparencia que este quería imponer”.