La Agencia Europea de Seguridad Alimentaria (EFSA) emite un veredicto negativo sobre más de 800 supuestas propiedades saludables de alimentos funcionales, incluyendo probióticos.
La (EFSA), por tercera vez consecutiva, ha vuelto a decir que las propiedades saludables que se atribuyen muchos de los llamados alimentos funcionales (como yogures o zumos con supuestos beneficios para la salud) no están científicamente demostradas. O, al menos, no lo suficiente como para utilizarlas como reclamo publicitario.
Y es que uno de los peligros de la publicidad de efectos saludables de alimentos funcionales es que las personas piensen que estos son independientes al estilo de vida. "Lo que produce inquietud es que el ciudadano que sigue una dieta desequilibrada piense que este tipo de productos le va a compensar". (Ver más >)